Whispers from the City

En este tiempo que he estado ausente del blog (que no del instagram, pero si de las otras redes sociales (lo siento lo siento lo siento)) he estado cogiendo ideas, aprendiendo y demás de como gestionar mi blog para que sea más... como decirlo... "profesional" con la idea de expandirme y hacer que mis ideas, recetas y pensamientos lleguen a más gente.

También cabe decir que mi niño y su energía ocupan mucho tiempo, pero sabiendo como administrarlo podré ser una bloger mami molona (lo de mami molona es de Icuma (nick en instagram) en su blog "Una Madre Molona" que yo le he cogido prestado)
¡Nena, tu y tu niña molona moláis muchísimo!

Iréis recibiendo más noticias en estos días donde seguiré buscando y aprendiendo para que entrar a Whispers From The City sea una experiencia increíble. (Se aceptan sugerencias, y si queréis contactar con nosotros, aquí os dejo el correo whispersfromthecity@gmail.com)

¡Manos a la Obra!


*image via pinterest

Cuanto juego puede darnos un jardín ¿verdad?

En casa tengo un terremoto, y es que Gael no para quieto en todo el día, pero mi príncipe que es el niño más bueno que conozco (que va a decir su mami, pero es cierto eh?) a veces se pone en modo independiente on y yo esos ratitos suelo hacer algún postre o algo que tenga en mente tipo manualidad o así.

Ahora mismo mientras escribo el está viendo los anuncios pegadito a mi, observando también lo que hago, no se que me escape o me pierda mientras el está atento a otra cosa.

Ayer, en uno de esos ratitos me puse mano a la obra con una receta facilisima que llevábamos días pensando en hacer y que de verdad, ¡quedó deliciosa!



Para hacerla necesitamos

- 1 plancha de masa de hojaldre
- 1 bote de nata (materia grasa 35% para que monte bien y no se baje enseguida)
- Azúcar
- Azúcar glass

Casi nada, ¿verdad?

Empezamos



Estiramos un poco la masa de hojaldre con un poco de harina por encima para que no se nos pegue al rodillo.


A continuación la cortamos en tres partes iguales a lo largo y las pinchamos con un tenedor para que no crezcan mucho en el horno.


Precalentamos el horno y las ponemos 8 minutos a 200ºC cubriendo el hojaldre con un papel para horno y ponemos encima algo que pese un poco para que tampoco levante en exceso. (yo cuando pasaron los 8 minutos quité la bandeja que puse y el papel y lo doré unos dos minutos para que quedaran más bonitas)

Montamos la nata con una batidora de varillas y cuando casi esté montada añadimos el azúcar a nuestro gusto y seguimos batiendo hasta conseguir la textura (no batirlo muy rápido o nos saldrá mantequilla)

Dejamos enfriar las placas de hojaldre y cuando ya lo esté vamos montando capas poniendo entre ellas la nata.


Para finalizar espolvoreamos por encima con el azúcar glass (yo lo hice usando un pequeño colador para que no quedaran bolitas)


¡Y ya está!



Lo que os dije, es facilisima y no os llevará más de media hora prepararla. Y creo que tardaréis menos en comerla.

Si la hacéis espero que me contéis que tal os ha salido y si ha triunfado, pero ya os aseguro yo que sí, ¡sin duda!

XOXO

Pd: Ayer celebrábamos que mi pequeño ya tiene ¡19 meses! Se nos hace grande a pasos agigantados.
Y mientras se hacía el hojaldre en el horno le hice esta pequeña galleta amorosa. Y es que... cada día me tiene más enamorada!

Desde siempre las conocidas como "luces de Navidad" me han fascinado.
Podemos darle mil usos y cada día la vemos más en decoraciones cotidianas, celebraciones y similares.
 Claramente no tienen por que ser un adorno de una época concreta del año, y lo mismo debió pensar
"wit & whistle" al hacer estos cubitos de papel para decorar cualquier ocasión o rincón de nuestro hogar.